El testimonio de una joven que ha decidido posponer su maternidad es uno de los muchos que llegan a Eugin
“Me llamo Lucía y tengo 32 años. Tengo pareja desde hace cinco, pero no quiero ser madre ahora. ¿Es extraño? A veces pienso que no, a veces no sé si me estaré equivocando. Tengo una hermana tres años mayor que yo que tuvo su primer hijo a los 29 y ahora está esperando el segundo. Y a mí me encanta ser su tía, y jugar con él, pero no creo que sea mi momento para tener un hijo ahora. Todavía tengo cosas que hacer antes de embarcarme en una aventura como ésta: quiero mejorar mi situación laboral y quiero estar preparada para darle a mi hijo o hija lo mejor. Por suerte, mi novio me apoya y está dispuesto a esperar al momento adecuado, pero no toda la gente de mi entorno entiende mi situación. Me dicen que cuando quiera ser madre será demasiado tarde…”
El equipo de psicólogas de Eugin recibe consultas como estas a diario. Y es que, a pesar de los cambios en la sociedad, de los nuevos modelos de familia (monoparentales, madres solteras, parejas homosexuales…), todavía existen muchos prejuicios acerca de la maternidad. Se “supone” que una mujer “debe” ser madre cuando “toca”: estos tres verbos son entendidos por muchas mujeres jóvenes casi como una obligación. O eres madre ahora, o luego no podrás y te arrepentirás.
Ser madre o no ser madre ahora, una opción personal
Sin embargo, gracias a los avances en la medicina, una mujer puede decidir posponer su maternidad hasta el momento en que se siente preparada. La congelación de óvulos es, en este sentido, la opción que eligen la mayoría de ellas. La vitrificación les permite asegurar la calidad de sus óvulos y usarlos en el momento en que tienen el deseo de quedarse embarazadas.
Según los expertos, la mujer que decide posponer su maternidad responde a varios perfiles y, en la mayoría de los casos, su decisión ha sido muy meditada y consciente. Es, pues, una mujer responsable que quiere lo mejor para su hijo y, por tanto, prefiere esperar al momento adecuado. Es, también, una mujer independiente, segura de sí misma, que no se deja influenciar por su entorno: ser madre es una decisión personal que depende de muchos factores. La mujer que decide aplazar la maternidad tiene muy claro que será ella quien tome la decisión de ser madre, no su entorno o las presiones sociales.
Asimismo, la mujer que opta por congelar sus óvulos es una mujer organizada y previsora que piensa en el futuro y sabe planificarlo. Que se atreve a pensar por sí misma y a tomar las decisiones de manera independiente. Ser madre no es una obligación: es una elección. Y si la mujer no se siente preparada, tiene el derecho a posponerlo y a confiar en los avances médicos y en las técnicas de reproducción asistida para poder llevar a cabo este deseo cuando ella quiera.