Artículo de Kate Brian, periodista y autora de 4 libros sobre maternidad y fertilidad
Si estás siguiendo un tratamiento de reproducción asistida es esencial que puedas depositar tu confianza en la clínica en la que te estás tratando. Cuando se trata de algo tan valioso como hacer bebés, el proceso es complejo y tienes que poder contar con la plena confianza del equipo de la clínica y sus procedimientos. Muchas pacientes tienen un miedo que no suelen compartir: que pueda ocurrir cualquier tipo de confusión en el laboratorio de modo que te transfieran el embrión, los óvulos o el semen de otra persona. En realidad, esto es tan improbable que cuando ocurre aparece en todos los titulares de la prensa. Si esto ocurre y tú estás en tratamiento, es normal que te genere mucha ansiedad. Sin embargo, si alguna vez tienes ocasión de visitar un laboratorio de una buena clínica de reproducción asistida, verás que lo que más te sorprende no es el material de alta tecnología que se utiliza o la peculiar vestimenta de los profesionales, sino la cantidad de tiempo que invierten en realizar comprobaciones para asegurarse que no hay ningún margen de error cuando se trata de los óvulos, el esperma o los embriones de los pacientes. Evidentemente, cada clínica tiene su propio protocolo, pero en cualquier caso cada muestra está debidamente etiquetada y cada vez que los embriólogos mueven los recipientes que contienen esperma u óvulos de una parte a otra del laboratorio, ese movimiento es comprobado y presenciado por otro miembro del equipo, que además se encarga de registrarlo. De esta manera, dos profesionales están comprobando que no se produce ninguna confusión en ninguna de las fases de tu tratamiento. Eso por sí sólo puede darte algo de confianza sobre el cuidado que las clínicas tienen a día de hoy. Sin embargo, para eliminar cualquier probabilidad de error humano, muchas clínicas han invertido además recursos en sofisticados sistemas de control electrónicos y de códigos de barras. De esta manera, al llegar a la clínica cada paciente recibe un código único almacenado en una tarjeta especial con un microchip que se utiliza para comprobar su identidad. Óvulos, esperma y embriones se etiquetan con una identificación especial, y si se juntaran muestras incorrectas o el embrión no coincidiera con la identificación de la tarjeta de la paciente en el momento de la transferencia embrionaria, saltaría una alarma. Mediante el código de barras, todos los óvulos, el esperma y los embriones están especialmente etiquetados, y esto se comprueba de nuevo con el código del paciente. Las pacientes piensan a veces que sus preocupaciones sobre los errores en el laboratorio son absurdas, y no se sienten seguras para plantear preguntas sobre este tema, pero es importante hacerlo y saber que puedes sentirte segura sobre tu seguridad. No importa si todavía te estás planteando a qué clínica ir o si ya has iniciado el camino del tratamiento: no deberías tener reparos en preguntar a la clínica de qué tipo de sistema disponen para asegurarse que no habrá ningún tipo de problema en el laboratorio. La mayoría estarán encantados de explicarte los procedimientos y el tipo de tecnología que utilizan para que estés segura que la seguridad en el laboratorio es de suma importancia. Ten en cuenta que, a día de hoy, las confusiones en los laboratorios de reproducción asistida son muy poco probables. Saber que existen sistemas de monitorización especializados te hará sentir segura. Es importante analizar las cosas con perspectiva y tener en cuenta que cada año se llevan a cabo decenas de miles de tratamientos de reproducción asistida en todo el mundo, todos ellos con total seguridad y precisión. Kate BrianEscritora y periodistaKate Brian es periodista, escritora y autora de cuatro libros sobre maternidad y fertilidad, incluyendo The Complete Guide to IVF. Kate empezó a escribir des del punto de vista de las pacientes sobre infertilidad tras haber realizado ella misma un tratamiento de fecundación in vitro. Actualmente, Kate colabora en varios medios como experta en fertilidad y escribe su propio blog, donde aporta las últimas noticias y puntos de vista sobre temas relacionados con fertilidad así como consejos útiles y recursos para quien está intentando tener un bebé.
