Antes de empezar un tratamiento de reproducción asistida, las gente cree que lo más difícil será todo aquello relacionado con los aspectos médicos: las inyecciones, la medicación, las visitas a la clínica… Pero de hecho, lo que finalmente acaba siendo más difícil de llevar son los altibajos emocionales que se experimentan durante el tratamiento, y en concreto, durante las dos semanas de espera después de la transferencia embrionaria hasta el momento en el que sabrás si estás embarazada: lo que se conoce como la betaespera.
Cuando has estado un tiempo intentando quedarte embarazada sin conseguirlo, las dos semanas de espera antes de saber si el tratamiento ha funcionado se presentan como un horizonte interminable. Tus médicos te harán recomendaciones sobre las cosas que deberías evitar hacer durante las dos semanas de espera, pero casi todo se reduce al sentido común, puesto que es poco probable que hagas algo que reduzca las probabilidades de éxito. Es posible que actividades que forman parte de tu vida diaria de repente te parezcan una amenaza que puede influir en el resultado, y que sientas que lo mejor sería envolverte en un algodón o irte a la cama. Puedes estar tranquila: varios estudios niegan que quedarse en cama haciendo reposo tras la transferencia embrionaria sea beneficioso.
¿Qué puedes hacer para pasar esta espera lo mejor posible?• Asegurarte de que comes una dieta sana y equilibrada durante estos días, evitando la comida basura, te ayudará a sentirte mejor. Aportando a tu cuerpo las vitaminas y nutrientes que necesita, conseguirás además un mayor bienestar. • Si has contado a tu familia y amigos que estás siguiendo un tratamiento, puede ser de ayuda limitar el número de personas que saben exactamente cuándo lo empiezas y en qué momento estás esperando para saber si ha funcionado. Ten en cuenta que puede resultar pesado tener a varia gente a tu alrededor preguntándote si hay novedades. • Mantenerte ocupada es clave para afrontar la betaespera. Para muchas mujeres, trabajar y llevar una vida lo más normal posible es de gran ayuda, puesto que ello conlleva tener que concentrarse en otra cosa. Otras, en cambio, optan por no trabajar durante este período de tiempo… Si prefieres esta opción, deberías asegurarte que tendrás cosas que hacer si te quedas en casa: ¡Quedarte sentada preguntándote si el tratamiento ha funcionado o no puede resultar más estresante que ir a la oficina! • Asegúrate de salir al aire libre y hacer ejercicio. Puede que no te apetezca correr maratones, pero pasear por el parque o el campo te ayudará a darte un respiro. • Si hay cosas que sabes que te ayudan a relajarte, éste es el momento de hacerlas, ya sea practicar la meditación, hacerte la manicura o ver comedias en la tele. • Es fácil empezar a obsesionarse con los síntomas de embarazo durante la betaespera, pero recuerda que la mayoría de las mujeres no tienen ninguno de estos síntomas -como las náuseas matinales- hasta más adelante. No tener ningún síntoma no quiere decir que el tratamiento no haya funcionado. • Intenta no caer en la tentación de hacer tests de embarazo en casa durante estos días. Estos tests son muy precisos cuando se utilizan en el momento adecuado, pero si se realizan demasiado pronto, pueden dar un resultado incorrecto. • Mímate. Cómprate el último libro o DVD, consigue tus revistas preferidas, ve al cine o al teatro, busca tiempo cada día para tocar el piano, cantar o cuidar de tus plantas. Las cosas que nos hacen felices son distintas en cada una de nosotras, pero ocupar el tiempo libre con aquello que más nos gusta hacer nos ayudará a pasar una bestaespera menos estresante.