La deportista valora la congelación de óvulos como una “oportunidad óptima para la mujer”
La laureada floretista italiana Elisa di Francisca reflexiona sobre el reto de armonizar la vida familiar con el deporte de alta competición. A sus 30 años, la campeona olímpica de esgrima y brand ambassador de Timefreeze destaca la congelación de óvulos como una gran oportunidad para decidir más libremente cuándo y cómo abordar la maternidad.
¿De dónde viene tu pasión por la esgrima?
Nací en Jesi (Ancona), en el centro de Italia. Mi ciudad es la cuna del florete y en ella han nacido muchos campeones de esgrima. Para mí fue algo natural iniciar esta carrera deportiva con tan sólo siete años, tras un breve paso por la danza. La esgrima me apasionó de inmediato y tras 23 años de trayectoria, he conseguido todas las satisfacciones que deseaba. Quiero seguir adelante, conseguir más… ¡Y hacerlo cada vez mejor!
¿Tienes algún referente que haya guiado tu vida personal y profesional?
Sin duda el maestro Triccolli, un profesor de esgrima muy conocido en mi ciudad que me inició en este arte cuando era tan sólo una niña. Al poco tiempo, Triccolli le dijo unas palabras muy especiales a mi madre: «Señora, Elisa tiene oro en sus manos. Sólo tiene que darse cuenta y cogerlo».
¿Cuáles son tus principales valores como persona?
La honradez, el respeto y el altruismo.
¿Y los tres adjetivos que te definen mejor?
Me considero una persona generosa, instintiva y determinada.
¿Te consideras una luchadora por los derechos de la mujer?
Sí. Estoy comprometida con Intervita, una ONG de cooperación que desarrolla proyectos humanitarios en las partes más pobres del mundo. Con esta organización me he volcado en proyectos dedicados a las mujeres explotadas y que buscan ayuda. Me refiero concretamente al delicado tema de las mutilaciones genitales femeninas.
¿Cuál es tu próximo reto deportivo?
Tras haber logrado otras dos medallas de oro individuales en los Europeos y los Juegos del Mediterráneo en Turquía, mi próximo reto importante son los Mundiales de esgrima de Budapest de este mes de agosto.
¿Y tú próximo desafío personal?
Quiero marcharme otra vez con Intervita a una nueva misión humanitaria. Esta vez en Camboya, en octubre, cuando esté más libre de torneos y entrenamientos.
¿Qué opinas de la congelación de óvulos?
Pienso que es una oportunidad óptima que se ofrece a la mujer para preservar su fertilidad y decidir tener un hijo en el momento adecuado.
¿Por qué decidiste enarbolar la bandera de Timefreeze como brand ambassador de la marca?
Timefreeze es una técnica de vitrificación de óvulos que practica la clínica Eugin de Barcelona gracias a la cual cualquier mujer puede decidir congelar sus óvulos cuando es joven. Así, cuando más adelante decida quedarse embarazada, podrá descongelarlos y fecundarlos. Es una técnica tan innovadora que me ha parecido natural adherirme a esta fantástica revolución para las mujeres en cuanto a la preservación de su fertilidad.
Como deportista de élite y mujer… ¿Es difícil conciliar la vida personal con la profesional?
Sin duda. Siempre estoy de gira por el mundo, con la maleta encima de la cama y para el hombre que estuviera conmigo no sería fácil soportar este continuo alejamiento. Sin embargo, los amigos y la familia siempre están cerca aunque estén lejos, y de esta manera, logro cultivar y mantener una relación muy hermosa y profunda con ellos.
¿Cuáles son las principales dificultades de este ritmo de vida?
Como decía antes, la lejanía es una de ellas. Además, soy una persona obstinada y celosa, que necesita constantes atenciones y ser tratada de un cierto modo. ¡Pero estoy segura que tarde o temprano lograré encontrar a mi media naranja!