La adopción no es la única alternativa posible a los problemas de fertilidad, aunque ciertas personas de tu entorno así lo crean
Para quienes hemos dedicado tiempo y esfuerzo en conseguir un embarazo, se trata de una pregunta con la que estamos familiarizados. Sí, en algún u otro momento alguien nos ha preguntado: “¿por qué no adoptas y ya está?”. Vaya por delante que la adopción es una opción magnífica para muchas personas, tanto para los padres como para los hijos. A los niños que necesitan una familia les ofrece un hogar feliz y los padres reciben el preciado regalo de unos niños que serán muy queridos. Sin embargo, la adopción no es para todo el mundo y es importante reconocerlo.
Cuando quieres dar a luz El deseo de reproducirnos es un instinto humano básico y fundamental, y querer quedarte embarazada y dar a luz es parte de lo que sueñas cuando piensas en formar una familia. Se trata tanto del camino para llegar a tener un hijo como del hecho de ser madre.
Siempre recordaré que tras mi primer ciclo de fecundación in vitro, que no dio resultado, alguien me dijo que si no había funcionado probablemente era el momento de aceptar que la reproducción asistida no estaba hecha para nosotros y que deberíamos considerar la posibilidad de la adopción. Quien lo dijo quería ser de ayuda —nos ofrecía una ruta alternativa—, pero recuerdo que me sentí completamente destrozada. Parecía que me estuvieran diciendo que no tenían ninguna fe en que nuestro tratamiento fuese a tener éxito y que no tenía ningún sentido continuarlo. De hecho, nuestro siguiente ciclo funcionó a la perfección y tuvimos dos niños como resultado del tratamiento de reproducción asistida. Nunca olvides que la gente que no ha vivido problemas de fertilidad y tratamientos de reproducción asistida suele saber muy poco del tema. Así que no dejes que influyan en la decisión que vayas a tomar si te sugieren que deberías seguir adelante antes de que tú misma te sientas preparada. Mitos sobre la adopciónCon frecuencia, las personas que te preguntan “¿y por qué no adoptas?” hablan de la adopción como si fuese tan sencillo como ir al súper a hacer la compra semanal. Quizá piensen que puedes colocar a cualquier niño que necesita una familia a una pareja que busca un hijo, así, sin más, y que todos acaban siendo felices y comiendo perdices. En realidad, la adopción acostumbra a ser un proceso largo y complicado, y muy posiblemente sientas que necesitas tomarte un respiro tras el tratamiento de reproducción asistida.
Hay parejas que siguen adelante con su decisión de adoptar y acaban teniendo unas familias muy felices, pero esto no significa que esta sea la opción idónea para todos aquellos que persiguen, sin éxito, el embarazo. Es curioso que las mismas personas que preguntan a las parejas que siguen un tratamiento que por qué no adoptan, nunca plantearían lo mismo a una pareja que está buscando un hijo de manera natural. Y al final, ¿cuál es la diferencia? ¿Por qué quienes necesitan ayuda para concebir deberían ser más aptos como padres adoptivos o estar más dispuestos a adoptar? ¿Por qué no pueden querer vivir la experiencia de la concepción, el embarazo y el parto? La próxima vez que alguien te pregunte “¿por qué no adoptas y ya está?”, recuerda que seguramente lo único que pretende es proponer una solución positiva. No dejes que un comentario así te haga daño o te altere. Si no es un camino que deseas explorar, está bien, que digan lo que quieran. Anhelar quedarte embarazada y dar a luz no es egoísta, es un deseo humano de lo más natural.