Los días se cuentan uno a uno. “¿Cuánto queda hasta el análisis de sangre y el resultado? ¿Habrá funcionado?” La espera se hace interminable…
La espera después del transfer es, sin ningún tipo de duda, el período más difícil durante un proceso de reproducción asistida, ya sea después de una inseminación artificial o de una fecundación in vitro. Antes del transfer, la estimulación ovárica parece larga y dolorosa, pero físicamente, no es tan dura como una podría pensar. Las inyecciones de la estimulación empiezan a ser dolorosas a fuerza de estar poniéndote la inyección en el mismo sitio, pero no hay nada más allá, es perfectamente soportable. Y en cuanto al dolor, realmente, de qué estamos hablando: ¡unos segundos o unos minutos como mucho! El sufrimiento moral que puede aparecer después del transfer, ese periodo de espera interminable que se queda de forma permanente, es mucho más difícil de aguantar. Las dos semanas más largasPara muchas de nosotras, son dos semanas muy largas, de hecho las más largas de todo el proceso, e incluso, según el número de intentos anteriormente realizados, puede que sean las dos semanas más largas de nuestra vida… Dos semanas de tortura. De hecho, la espera del resultado genera a menudo una ansiedad extrema en las mujeres y sus parejas. Los días se cuentan uno a uno. “¿Cuántos días han pasado después del transfer? ¿Cuándo queda hasta el análisis de sangre y el resultado? ¿Habrá funcionado? Seguramente ha funcionado. No, está realmente difícil, es casi imposible que haya funcionado”… ¡Es interminable! Cada una encuentra su técnica y sus métodos para aligerar este periodo de espera, de estrés y de tensión: Algunas se pondrán a trabajar mucho, se harán una planificación digna de un ministro, llena de pequeñas o grandes cosas a hacer para sentirse constantemente ocupadas. Es bueno distraerse y hacer que pase el tiempo. Es una forma de evitar obsesionarse con el calendario. Lee, cocina, ve a la esteticista y hazte un completo: cuidado facial, manicura, pedicura, masaje completo… ¡Cuídate! Sal con tus amigas, vete de compras, un paseo corto o uno bien largo, haz puzles, bricolaje, un cine, un concierto, ir a ver una exposición, visitar un museo… O irte de viaje, ¿Por qué no? ¿O sólo un fin de semana? Si es de los largos, mejor… Te permitirá desconectar, pensar en otras cosas y ver nuevos horizontes… Grupos de apoyoArrímate a mujeres o parejas que estén pasando también por la espera. Su ayuda te resultará inestimable. Habla con ellas por internet, a través de un foro o de Facebook, y queda con ellas para daros apoyo mutuo. Existen numerosos grupos de apoyo y numerosos blogs! Si no hay grupos de apoyo en tu barrio o ciudad… ¡Créalo tú! En resumen, lleva una vida normal. Numerosos estudios indican que “incubar” u obligarse a hacer reposo durante este periodo no favorecen en nada el embarazo. En realidad, una vez el transfer está hecho, hay pocas cosas que puedas hacer para mejorar tus probabilidades de éxitos, así que… ¡Haz lo que sea para que este periodo de espera y pasividad sea lo más corto y agradable posible para ti y para tu pareja!